Casa da ponte de Penas

Increíble este lugar en pleno Camino de Santiago! Muy muy recomendable. La terraza viendo el campo con las vacas pastando, el delicioso desayuno, la piscina tan tranquila, la comida exquisita para cenar y comer, la limpieza de las habitaciones y sobre todo la amabilidad, es todo perfecto. Muy recomendable.

Buena ubicación
Habitaciones limpias y sitio acogedor, con un personal muy amable.

El mejor alto de todo el camino. Merece la pena desviarse del camino original, del camino de Santiago, para reponer fuerzas, ya que el trato del personal es exquisito, te acompañan tu consumición con un buen aperitivo, cortesía de la casa. Además las vistas son espectaculares.

Encantado con nuestra estancia aquí. Personal y propiedad súper amables, instalaciones muy modernas y bonitas. Muy tranquilo y te hacen sentir como en casa. Para repetir seguro. Gracias por todo.

Al sitio no le falta detalle, habitaciones amplias, baños grandes, pero lo mejor el personal, las vistas y el restaurante, no tienen un pero.
Nos quedamos una una noche y porque no había más disponibilidad, el trato es incomparable te hacen sentir que estás en tu casa, tanto el propietario como todos los huéspedes con los que hemos coincidido.
La piscina superagradable no de estas que no te puedes meter porque el agua te congela las ideas.
Buen servicio de bar y el restaurante con una comida de lo mejor que he probado, desayuno sencillo pero con todo lo imprescindible, pero lo mejor de todo, bien hecho, desde el café a la bollería.
Mil gracias a su propietario porque hemos pasado una velada encantadora.
Deseosos de volver a esas jornadas gastronómicas que quiere hacer por el invierno
Y desde aquí también a esos inquilinos, como nosotros con los que fue un placer charlar y con algunos tomar hasta unas copas, el sitio hace que se propicien esos encuentros

Es un sitio maravilloso en el que nos hemos sentido como en casa, tanto Fernando, como Irene y todo el personal encantadores y siempre dispuestos a lo que necesites. En plena naturaleza, admiten perro y puede estar en cualquier estancia contigo. La piscina está genial. Hemos disfrutado un montón, volveremos seguro.

El sitio es eso increíble, y los propietarios una gente estupenda sin lugar a dudas. Lo conocimos de casualidad haciendo el camino de Santiago y volveremos pero ya a pasar un fin de semana largo o algo así.
El sitio es nuevo, pero guardando el encanto rústico, las habitaciones son un lujo, la finca preciosa, con piscina y demás. No soy de escribir reseñas, pero en este caso se lo merecen tanto por el sitio como por lo buena gente que son los dueños. Un paraíso!!

Un lugar mágico, con unos detalles muy bien cuidados, nos alojamos con nuestro perrito y nos atendieron como reyes. La atención es de primera, son cercanos y te hacen sentir como de la familia. Las instalaciones son de alta calidad y aunque no pudimos disfrutar de la piscina si que disfrutamos del entorno que es una maravilla. Si estais haciendo el camino de santiago con perro, o sin él, este es el sitio que os merecéis para descansar. Deseo mucho éxito a sus propietarios.

Nuestra estancia ha sido perfecta. Tanto las habitaciones como el personal todo de 10. Muy limpio, tranquilo y cómodo. Sin duda repetiría!

Gracias por vuestra disponibilidad en todo momento y por hacernos sentir como en casa, hemos estado muy a gusto.

Destaco el ambiente familiar, la tranquilidad, las cenas riquísimas en el campo pero sobre todo el personal.

Volveremos!

La casa es un 10, es maravillosa, bonita, cuidada, nuevo todo, destaca la calidad de los materiales empleados y el buen gusto en su restauración. El ambiente es extraordinario, se respira paz y Fernando, el mejor anfitrión de toda Galicia. Volveremos sin dudarlo.

Mi estancia fue de 10, trato inmejorable con el personal, la habitación muy acogedora y la cama muy cómoda. Si vienes haciendo el Camino de Santiago puedes aprovechar para relajar las piernas en su piscina.
P.d. No te vayas sin probar su chuleta.

Simplemente inmejorable. Tanto el hotel como el personal, te hace sentir en casa 🤍
No tengo palabras de agradecimiento para la experiencia que nos hicisteis vivir allí.
Gracias por todo y volveremos a vernos.

El hotel muy nuevo, confortable, la calefacción funciona a la perfección, suelo radiante, el dueño muy hospitalario y flexible, desayunamos cuando quisimos. La zona preciosa, una piscina fantàstica, en medio de la naturaleza y muy cerca de Melide a la vez. Pasa por ahí el camino complementario que se junta a unos minutos y a otros 10-15 minutos
con el francés, que hace una circular. Dormimos de maravilla, muy tranquilos, la ducha también muy bien, el agua caliente funcionaba perfectamente, ducha grande y moderna. Volveremos encantados, altamente recomendable, saludos desde Balears!

Fui a pasar unos días y me llevo a un amigo, Fernando el anfitrión nos hizo sentir como en casa desde el primer día. Irene, Carlos, Javier, “Mentefrita”😂 y todos los que allí conocimos dieron un toque personal a nuestra estancia como si de amigos de toda la vida se tratara. Lugar espectacular, buenos chuletones a la piedra con los mejores vinos, ubicación estupenda en pleno Camino De Santiago y muchas ganas de agradar al huésped y hacerlo sentir bien. Si vais por allí pedirle al anfitrión ver la casa museo 😉 merece la pena!!!!!

Hemos tenido una estancia muy acogedora. La casa está prácticamente nueva y muy cuidada. El personal se ha portado de modo fantástico haciéndonos sentir como en casa. La piscina un lujo. Gracias por todo.

Una muy agradable parada en medio del camino hacia Santiago.

Es un sitio perfecto para desconectar, además está a escasos minutos de Melide desde donde puedes ir a cualquier lado.
Fernando, el dueño, te trata como si te conociera de toda la vida. Vamos estás como en casa. Las habitaciones, instalaciones y piscina increíblemente limpias y perfectas. Dentro de unos años repetiremos seguro

Estamos impresionados!! Que maravilla de casa rural, con una ubicación de en sueño. Ideal para unos días de descanso en medio de la naturaleza. Bien cuidado y bonito con una piscina preciosa y un trato tan amable y servicial que invita a hospedarse. Gracias😍

No suelo poner muchos comentarios pero somos tres ciclistas haciendo el camino y la experiencia de este lugar es algo insólito. Fernando te acoge con un bondad y alegría especial, haciéndote reír, con hospitalidad, amante y conocedor de su tierra. Hemos pasado una noche de lujo. Su ternera asada está de lujo. Todo es auténtico. No hay nada falso. Su casa está restaurada con gusto y detalle. Nos hizo un "tour" por la casa antigua explicando cada detalle. Sin lugar a dudas si repito el camino de Santiago (que lo repetiré) habrá una parada en este sitio.