Casa Rural El Rincón de Tarabilla

Maravillosa experiencia.
Nos alojamos en habitación doble del piso superior. Habitación amplia y confortable, exactamente iguales condiciones del baño.
Rico desayuno.
Carmina inmejorable anfitriona, mujer atenta en todo y la chica que trabaja allí también muy agradable.
El pueblo con muchísimo encanto. Para repetir con más tiempo 😊.

Servicio impecable el que ofrece Carmina, te sientes como en casa. Lugar muy acogedor, desconexión total y pueblo muy bonito para conocer. Recomiendo al 100%

Hemos estado seis adultos y tres niños en el puente de octubre. La casa muy bonita y confortable. Te incluye el desayuno, café, frutas de la huerta,... Tiene todo lo necesario.Carmina es un encanto, nos ha preparado hasta una tarta de manzana que estaba buenísima. Si volvemos por la zona, repetiremos.

La estancia en el Rincón de Tarabilla resultó genial. Todo muy limpio, desayuno casero y fruta recién recogida. Carmina nos enseñó las bodegas y resultó una experiencia que no te puedes perder para conocer Fermoselle.

Buena casa y magnífica dueña. Nunca he encontrado a nadie en turismo rural que te ayude tanto como Carmina. Ni buscando se encuentra un lugar donde te lo pongan más fácil. Buen descanso y buenas instalaciones. Espero volver.

Casa rural bonita, limpia y cuidada. Atiende Carmina, que es un amor que siempre nos cuenta cosas de Fermoselle. Es un pueblo fabuloso, digno de visitar. El entorno natural es impresionante. No dejéis de hacer una visita a las bodegas. No puede ser más recomendable.

Es mi primera experiencia en pasar un fin de semana en una casa rural, al llegar, ya la fachada me pareció muy bonita! Y al entrar muy agradable y cómoda, todo muy limpio, los dormitorios amplios y la cama muy cómoda, con la comodidad de un baño individual en cada habitación, en la estancia disponíamos de cestas de frutas del lugar, Carmina, la dueña, encantadora! Dispuesta a ayudarnos en todo lo que precisaramos nos despidió con un bizcocho casero muy rico, os animo a visitar esta casa rural, no defraudará a nadie, os encantará, Eso si el pueblo está preparado para auténticos alpinistas, y gente amante del senderismo.

En pleno centro de Fermoselle. El alojamiento bonito y cómodo, como si estuvieras en tu casa. Antes de perderte por las calles con el coche pregunta a la gente del lugar cómo llegar, dónde dejar las maletas y dónde dejar el coche. A nosotros nos atendió Monse en la casa, un encanto de persona. Para ver...las bodegas, La casa del Parque, el pueblo en sí es precioso de ver. La Plaza Mayor para visitarla y comerrrrrr muy bien en el restaurante El Medieval.

Preciosa casa rural con habitaciones limpias,todo ordenado.Desayuno casero,buenísimo.
La anfitriona Carmina de 10,recomendable 100%

Casa recién restaurada, con unas buenas calidades en general, buen gusto de restauración. Una cocina general para las cuatro habitaciones, y bien limpio.
El desayuno corre a manos de Carmiña que es una anfitriona genial tanto de la casa como del pueblo, ella misma os aconsejara que hacer en Fermoselle.

Inmueble rehabilitado en una casita rural muy atractiva y funcional. La calefacción funciona perfectamente, también tiene aire acondicionado. Servicio y ducha muy agradables. La mujer que lo regenta muy agradable, nos preparó un desayuno con productos riquísimos de su manufactura. Lo recomendaría totalmente.

Inmejorable. Aquí es posible disfrutar como si fuera tu casa. La propietaria te cede la vivienda en su integridad. Confianza absoluta muy escasa en otros lugares. Carmina es excepcional. Un 10

Situada en pleno centro del pueblo, muy limpia, muy tranquila y sin riesgo de que te quedes con hambre en el desayuno. Carmina, la anfitriona, es un encanto. De mejorar algún aspecto, en nuestra opinión, la comodidad de la cama, al menos la nuestra. Aparte de eso, un muy buen sitio al que ir y al que volver.

Estuvimos 5 personas en el puente de semana blanca febrero y nos atendió Carmina que es una excelente anfitriona , con una casa súper bien equipada en todos los aspectos de cocina, la calefacción buenísima y habitaciones muy confortables, nos deleitaba con mermeladas caseras y tartas hechas por ella.
Amable, atenta y encantadora ....volveremos a Fermoselle por qué es una zona espectacular
Gracias

Preciosa casita en el centro del pueblo, muy bien decorada y con una combinación perfecta entre lo rústico y las comodidades actuales. Carmina la dueña muy agradable, te enseña su bodega que es un típico ejemplo de las numerosas que hay en el pueblo.Y te hace un abundantisimo desayuno con productos caseros, tortilla , bizcocho de naranja, pastas de la zona, pan tostado con aceite de Fermoselle, con varios premios internacionales, mermeladas caseras....
El pueblo con sus calles judías en cuesta es muy original, recomiendo ver el atardecer en el mirador del castillo, que se sube por una calle que está en la plaza del ayuntamiento.
No se puede ir en coche hasta la misma casita, recomiendo ir por la carretera que rodea el pueblo hasta llegar a una fábrica de maderas que está junto a la carretera por ahí es fácil aparcar y justo enfrente hay una calle en cuesta que te lleva enseguida al centro del pueblo y a la casita que está muy cerca de la iglesia

Increíble sitio súper bonito u súper acogedor.
Volveremos a repetir

Muy bonita casa restaurada. Solo cuatro habitaciones. Muy limpio todo. La dueña un encanto. Desde orientarte para hacer excursiones como los super desayunos con cosas típicas y productos cultivados y manufacturados por ella. Altamente recomendable.

Una delicia de alojamiento. La dueña te trata para que te sientas como en casa, y te incluye el desayuno con productos de la zona. Si la cosa cuadra hasta te enseñará el pueblo, sus secretos 🤫 y bodegas. Las habitaciones son muy tranquilas. A mejorar los colchones, necesitan un cambio inminente, además suenan de lo lindo

Casa rural muy bonita y acogedora. La dueña atenta y amable. Precio correcto. Si váis por primera vez no intentéis llegar hasta la casa directamente con el coche porque se encuentra situada en el centro histórico entre calles muy estrechas y tortuosas.

Estamos encantados y muy agradecidos con el trato de Carmina que ha estado para todo lo.que hiciera falta. Además de preparar unos exquisitos y agradables desayunos. La habitación muy limpia, comanda y funcional, cuidando los detalles. Para repetir. Gracias Carmina por todo.