Bar El Escudo

Perfect

Muy bien, local pequeño, pero con una terraza exterior, donde se puede degustar fritos variados, raciones, tapeo...., personal muy atento y simpático, céntrico muy concurrido.

Bar de toda la vida. Las raciones buenísimas y el blanco de solera espectacular. Mencionar el joven que nos atendió, iba con mi madre con movilidad reducida y no pudo ser más amable y cuidadoso con ella, se merece diez estrellas. Muchas gracias por hacernos pasar un rato estupendo. Volveremos

Un sitio de los de siempre, nunca falla!!! Me encanta tener que cruzar la barra para ir al baño!!! Te sientes como en casa ..
No te puedes perder los huevos a la importancia!! Y comimos rabo de toro…. De 12, muy rico eso si.. me hubiera comido más
Repetiré sin dudarlo

Comimos en el comedor que está pasando por la barra.
Nos aconsejaron fuera de carta el pulpo con parmentier de patata que estaba espectacular. Además pedimos unas rabas y carrilleras de ibérico buenísimas, tarta de la abuela y cafés.
Muy rico todo y el personal muy atento y amable, sin duda una experiencia para repetir.

Ubicado en Torrelavega en la zona de vinos.
El establecimiento es pequeño tiene unas 6 mesas donde puedes tomar raciones, también tienes una terraza con mesas altas donde puedes tomar el aperitivo.
Puedes degustar un muy blanco de solera.
El vermút de solera también es muy bueno.
Famoso por sus raciones de patatas con chorizo, rabas, rejos, croquetas son todas caseras.
Raciones abundantes a buen precio.
Son muy atentos.

Este bar es estupendo, en el ofrecen adaptaciones sin gluten a varios de sus platos. Es un gusto comer allí y el trato de Lucas es excelente.

Un bar de toda la vida en Torrelavega. Buena atención y siempre dispuesto atenderte de la mejor manera. Eso sí, hasta las 16 puedes pedir algo de cocina. Luego la cierran a cal y canto.

Un bar de los de siempre de Torrelavega un sitio indispensable para ir cuando visitas la ciudad un trato excelente y una carta pequeña pero llena de cositas que no puedes dejar pasar, un indispensable si pasas por Torrelavega

Local pequeño y antigüo pero merece la pena ir. Las raciones están muy ricas. Camareros muy majos y súper atentos.

¡Un bar de los de toda la vida!Fuimos por las buenas reseñas que tiene y, tras haber estado allí, puedo afirmar que bien merecidas.
Los dos camareros súper atentos y amables. Nos recomendaron no pedir más raciones porque eran grandes, no es habitual encontrar tanta sinceridad. La ración el Escudo buenísima. Un lugar al que volveremos sin dudarlo.

Solo hemos venido a tomar un café, pero nos han tratado fenomenal, además de que el café es de los mejores que hemos tomado. Le han puesto un vaso de leche a niña y le han regalado una chocolatina. Nos ha encantado el detalle! Lo hemos descubierto tarde porque ya habíamos comido, pero repetiremos seguro!

He ido de casualidad y me ha encantado!!! Un sitio precioso, de toda la vida, Muy buena comida y un personal encantador!!! Totalmente recomendable!!!

Sitio perfecto para tomar el vermut ó para picar algo. Croquetas, Rabas, anchoas etc etc

He venido de vacaciones a pasar el puente de Semana Santa a Cantabria con mi pareja y buscando sitios para comer en Torrelavega nos salía este con muy buena puntuación.
Y la verdad que para mi se merece todas las estrellas.
Buena atención, trato agradable, gente encantadora, nos aconsejo lo que podíamos hacer y visitar, muy buena comida y nada caro. Si alguna vez vuelvo a Cantabria volveré a este bar sin dudarlo 10 de 10.

Bar de los de siempre, las rabas muy ricas y tiernas , el plato escudo muy recomendable lleva un poco de todo, de lo que tú médico no te recomendaría😂 pero que a todos nos encanta.
Un lugar para volver siempre.

Todo riquísimo. Pulpo, chipirones y bacalao en su punto y muy buena calidad.

Fuimos por casualidad y que grata sorpresa. Un bar de toda la vida con comida tradicional y bien hecha. El servicio muy bueno y el dueño muy amable.

Un bar de los de antes , buen blanco de solera y raciones ricas y abundantes

Todo lo que tiene de pequeño el local lo tiene de grande el resultado de la visita. Una parada a descansar y comer dio como resultado que entráramos en el Escudo. Sábado y la hora pasaba del vermú y estaba concurrido, muy concurrido. Qué bien estar de los camarareros, que parroquia amable, qué raciones,qué precio. No hizo falta buscar restaurante. Gracias.